All that we see or seem

Is but a dream within a dream.”


2015-01-14

Hola




Hola. Simplemente quería eso, decirte "hola". 

  No te confundas, no es nada insignificante. Soy ese extraño que se te sienta al lado en el metro y te sonríe sin motivo. Esa anciana sin nombre que, con un brillo nostálgico en la mirada,  te habla de cuando sus noches eran mágicas. Ese niño lleno de pecas que te coge la mano por error. Esa persona misteriosa que al pronunciar la primera palabra te hace ruborizar inevitablemente.


  Sé que hoy en día todos somos desconocidos que caminan y caminan como si fueran invisibles, como si realmente estuviéramos solos en la calle gris un sábado a las cinco. Como si fuésemos fantasmas anónimos fríos como la lluvia que dibuja anillos en los charcos que pisamos sin inmutarnos. 



  ¿Te has quedado en blanco? No hay problema, no es necesario responder. Puedes quedarte en silencio. Me gusta el silencio. Podría pasarme la vida sin decir palabra. Te permite darte cuenta de muchas cosas. Yo, por ejemplo, he descubierto lo importante que puede llegar a ser un simple "hola". Créeme, lo sé. He comenzado millones de historias con esa sencilla palabra. Recuerdos en sepia que vienen a mi mente como fugaces instantáneas. De hecho, odio los finales, y creo que toda historia debería comenzar y terminar con un "hola".